


Sopa Minestrone
Cuenta la historia que un joven hombre el día de su boda con la hija de su señor, al ser aficionado a la cocina, decidió ordenar preparar un plato de arroz hervido, al que agregó azafrán. El azafrán era una especia traída de oriente todavía muy poco común, cuya tendencia a tintar el material sobre el que se depositaba dio lugar a que el arroz adquiriese un tono dorado. Se dice que los invitados, al ver el arroz con dicha tonalidad, pensaron que traían pepitas de oro.